Puede ocurrir durante un gran esfuerzo, en el momento, inmediatamente después o incluso varias horas más tarde.

Causas

Las personas que sudan abundantemente o que realizan un esfuerzo muy intenso, son las que generalmente sufren de calambres. Cuando el entrenamiento de algún deporte provoca que el individuo sude mucho, su cuerpo pierde agua y sales minerales, lo que causa un desequilibrio en los electrolitos, en especial una carencia de sodio, o en la relación entre el sodio y potasio.

El calambre se produce cuando el músculo se empieza a llenar de toxinas y deshechos, así como a quemar oxígeno con dificultad.

Las mujeres embarazadas, también sufren de calambres con frecuencia, los cuales están relacionados con los cambios circulatorios o con el incremento de peso en la mujer. Asimismo, en ocasiones puede ser por la carencia de calcio y magnesio.

Además, se pueden presentar cuando existen problemas circulatorios o de irrigación del músculo, ya sea por una lesión, o por mantener mucho tiempo una postura que corte la circulación en algún punto.

Algunas enfermedades pueden provocar calambres, tales como:

• El resfriado y la gripe común
• Trastornos gastrointestinales
• Hepatitis
• Trastornos menstruales
• Tétanos
• Artritis

Síntomas

Generalmente, el dolor es muy intenso y se localiza en un músculo concreto. Además la tensión muscular es perceptible al tacto (rigidez), y resulta imposible mover el músculo hasta que el calambre haya terminado.

Prevención

En caso de que practique deporte de manera recreativa los calambres se pueden prevenir, si usted:

• Aumenta la frecuencia y la duración de los entrenamientos.
• Realiza con regularidad ejercicios de estiramiento y calentamiento antes de la actividad física, sobretodo de los músculos de las articulaciones inferiores.
• Toma bastante agua antes y durante su rutina de ejercicio, especialmente en días calurosos.
• Incluye en la dieta alimentos que contengan potasio, como: plátanos, jugo de naranja y papas.
• Si sufre de un calambre nocturno, tome un baño de agua tibia y realice algunos ejercicios de estiramiento antes de regresar a la cama, además mantenga sus piernas calientes.
• Para evitar el calambre abdominal, mejor conocido como "dolor de caballo", realice ejercicios de estiramiento antes de su entrenamiento y respire con la parte baja de los pulmones.

Tratamiento

Cuando sufre algún calambre se recomienda

• Interrumpir la actividad
• Dar masaje en el músculo
• Tratar de estirar el músculo, (con ayuda de sus manos si es preciso), relájelo un momento y vuelva a intentarlo.
• Cuando el calambre pase, realice movimientos con suavidad, de manera que el músculo trabaje, ya que si lo inmoviliza, se puede repetir.
• Refrescar con agua fría puede ayudar.
• En caso de que el calambre se presente en la pantorrilla, se debe estirar el pie extendiendo el talón hacia fuera.

En algunas ocasiones, un calambre se puede tratar de manera diferente, según el motivo, la ubicación y la persona que lo padece. El siguiente cuadro, muestra algunos de los calambres más comunes y su posible solución.

Consultar a su médico

Es importante que consulte a su médico si los calambres se presentan de manera continua. Su doctor realizará estudios para confirmar la existencia de algún proceso patológico. En caso de que sea necesario el médico le recetará los medicamentos necesarios, una dieta balanceada y una rehabilitación física adecuada.